Por: Rafael Pavía [Sociedad Gnóstica SAW]
Cuando encontré la enseñanza Gnóstica del Maestro Samael, en mi temprana juventud, me impacto leer el libro Psicología Revolucionaria y luego las primeras conferencias del curso básico de introducción a la Gnosis, donde ya se devela la clave de la Suprasexualidad. Ciertamente me impacto sobremanera de un modo positivo. Sin influencia de nadie, pues estos libros y conferencias me llegaron sin buscarlo, y sin que nadie me instruyera o me asesorara; quede prendido por una doctrina, que contenía un espíritu sin igual. Un espíritu franco, sincero, sin tapujos, directo, con un entrañable amor. Un Amor leal, sin pretensiones, donde se veía, por parte del autor Samael Aun Weor, la necesidad de un trabajo intimo, capaz de salvarnos de nuestra agónica ignorancia. Después busque un grupo gnóstico, para ser instruido a sabiendas de que encontraría la condición humana.
Supe ver lo que nos dice el Maestro Samael respecto a quienes pueden recibir esta enseñanza: “La Gnosis es el conocimiento iluminado de los misterios divinos reservados a una elite”. Esa elite no son precisamente privilegiados, en sus capacidades intelectuales, artísticas, personales, etc. si no una elite con una necesidad de comprender su realidad intima. Por ello se nos dice: “El Ser, revaluándose y conociéndose a sí mismo, es la Auto-Gnosis. Indubitablemente, ésta última, en sí misma, es la Gnosis”.
Después de treinta años en la practica activa de esta enseñanza, puedo dar testimonio y “Fe”, de que la doctrina gnóstica del Maestro Samael, es una revelación que trasciende los factores mundanos, exotéricos o externos, como el propio maestro indica: “La revelación gnóstica es siempre inmediata, directa, intuitiva; excluye radicalmente a las operaciones intelectuales de tipo subjetivo y nada tiene que ver con la experiencia y ensamble de datos fundamentalmente sensoriales”.
La verdad espiritual no se demuestra con una “fe ciega”, ni desacreditando a unos y otros, la verdad pertenece al ámbito intimo del alma. Cada cual posee su verdad intima, mas o menos alejada o cercana a su esencia real. Por mi parte hoy no tengo escusa, para dar testimonio después de estos treinta largos años de practica gnóstica, que los sueños lucidos existen, que la experiencia astral y jinas son reales, que el samadhi o éxtasis místico es alcanzable; pero estas experiencias apenas tiene valor sin la luz del Ser.
Reconozco que cuando encontré la gnosis, pensé que el Maestro Samael era un gran avatara, un gran maestro, pero realmente hasta que uno no vive la enseñanza, hasta que uno no experimenta su proceso de realización, no tiene verdadera idea de la dimensión y la capacidad del Maestro Samael. Porque este camino es íntimamente muy exigente, entonces se va dando cuenta uno de lo que es la disciplina esotérica, iniciática; que siquiera acercarse a la periférica perfección del Ser, requiere de enormes esfuerzos. Esfuerzos que todos los Maestros de la Humanidad realizaron. Por fortuna no solo el Maestro Samael logró en el movimiento gnóstico contemporáneo, su realización y maestría; sabemos con certeza que algunos misioneros han obtenido logros espirituales trascendentales. Misioneros que nos han demostrado por años un amor inmenso a la doctrina, un sacrificio tremendo por la humanidad, una humildad probada a fuego, etc. Esta cadena de misioneros han tenido que vivir, en esta época opaca espiritualmente, la penumbra de las tinieblas más espesas de todos los tiempos. Tinieblas que son tan oscuras por dentro como por fuera. Por ello la transmisión de la gnosis, requiere de un valor fuera de lo común, de una humanidad desbordada por la compasión.
En esta época como nos dice el Maestro Samael de “franca bancarrota de valores humanos”, podemos encontrar unos pocos, capaces de enfrentarse a sí mismos y recobrar o realizar dichos valores espirituales en sus humanas personas.
La esperanza y consuelo de esta humanidad, esta perdida si pretendemos encontrarla en el mundo exterior, la felicidad depende de nuestros estados internos, la paz, la libertad, el altruismo, la esperanza, la serenidad, etc. todo se obtiene en nuestro interior. Siendo los maestros de la humanidad y en estos tiempos el Maestro Samael las referencias para encontrar nuestra verdad, nuestro Ser, así dice el Maestro Samael:
"Nosotros no queremos idólatras, ni nos interesan los secuaces. Nosotros sólo somos postes de indicación; nuestra labor no es proselitista: indicamos con pensamiento lógico y concepto exacto el camino a seguir, para que cada cual llegue hasta su Maestro Interno, el Real Ser Interior que mora en silencio dentro de cada uno de ustedes".
"Les informaremos que la sabiduría pertenece al Ser y que las virtudes y dones no son cuestión de poses ni de fingidas mansedumbres, sino realidades terribles que nos convierten en poderosos robles contra los cuales se estrellan los vendavales del pensamiento, las amenazas de los tenebrosos y la contumelia de los malvados..."
"Esta sabiduría es para los rebeldes de todas las escuelas, para los que no contemporizan con amos, para los inconformes de todas las creencias, para los que aún tienen algo de hombría y les queda en su corazón una chispa de amor".
"No nos interesan los dineros de nadie, ni nos entusiasman las cuotas, ni las aulas de ladrillo, cemento o barro, porque somos asistentes a la Catedral del Alma y sabemos que la sabiduría es del alma".
"No andamos en busca de seguidores; sólo queremos que cada cual se siga a sí mismo, a su propio Maestro Interno, a su Real Ser, porque éste es el único que puede salvarnos y redimirnos...".
"No queremos más farsas; ahora queremos realidades vivientes, ahora queremos prepararnos para ver, oír y palpar los grandes misterios de la vida y de la muerte; ahora queremos empuñar la espada de la voluntad para romper todas las cadenas del mundo y lanzarnos en forma terrible a una batalla para la liberación, porque sabemos que la salvación está dentro del hombre..."
Sin duda que con la universal obra del Maestro Samael, hemos podido, estudiar y comprender el Taoísmo y su alquimia, el yoga hindú, el budismo chan y zen de China y Japón, el budismo hindú, el budismo tantrico del Tíbet. Mas aun la mitología griega, la mitología egipcia, incluyendo sus enseñanzas herméticas, los misterios de la cábala hebrea. También con el Maestro Samael hemos sido herederos del conocimiento esotérico de occidente, tanto de los teósofos, masones, rosacruces, etc. Y no falto el Maestro Samael a las enseñanzas de su tierra natal en América, mayas, aztecas, incas, etc.
Lo increíble del Maestro Samael es que como hemos podido verificar pacientemente, nos a extraído él la síntesis de todas estas tradiciones mencionadas, permitiéndonos conocer de un nodo rápido la esencia de todas estas doctrinas, pudiendo luego ampliar en el conocimiento de cada doctrina. Su capacidad de síntesis doctrinal es su característica, pero esto solo concierne a la parte externa de la enseñanza, la transmisión gnóstica se vive en nuestro proceso intimo de realización, solo con la paciencia digna de Job, puede uno llegar a ver como proceso, tras proceso, prueba tras prueba, aprende uno en la escuela de la vida la verdad Gnóstica. Pretender ser sabio sin la presencia del Ser, es ignorar las propias fuentes del saber.
La historia de la gnosis contemporánea podemos decir empezó con el libros del “Matrimonio Perfecto” por este libro el Maestro Samael fue, criticado, perseguido, encarcelado, esto sucedió en la década de los cincuenta del siglo pasado. Muchos no comprendieron porque el Maestro desvelo el gran arcano sexual, por que se consideraba algo demasiado secreto, como para que se publicara. Evidentemente faltaba a los espiritualistas y esoterista de aquella época la perspectiva del Maestro Samael; hoy en día podemos encontrar en todo occidente, como se a vulgarizado y desprestigiado el tantrismo sexual venido de oriente, porque aparece en revistas de sociedad, entre chistes de telecomedias, convirtiendo esta sacro-enseñanza en una cuestión de feria y kiosco. Hoy se debería reconocer la inestimable obra del Maestro Samael, pues como bien se sabe la alquimia sexual no tiene validez sin la formación ética y espiritual. Siendo él el salvaguarda de este bendito conocimiento, que podemos decir regenera y nos transforma el alma llevándonos a la esfera del espíritu.
Así la transmisión de la gnosis, tiene su cumbre en la realización del Ser, de los que supieron vislumbrar que el secreto de nuestra salvación, esta en nuestro interior, esta en el paciente y laborioso trabajo individual. Por lo que el movimiento gnóstico contemporáneo, esta formado por un grupo de individuos que indiferentemente de cómo llegaron y recibieron la enseñanza, se han comprometido como lo hizo el Maestro Samael a descubrir conscientemente la verdad de su Ser. Por eso mismo todo el esfuerzo y trabajo realizado en el movimiento gnóstico contemporáneo, es lo mas digno que en la actualidad se ha hecho por la humanidad.